La industria de la moda ha evolucionado en los últimos años, y con ella, la representación de cuerpos más diversos. Las modelos curvy, también conocidas como modelos plus-size, han ganado visibilidad y admiración no solo por su belleza, sino también por su actitud positiva hacia su cuerpo. A diferencia de los mitos que aún circulan, muchas de estas mujeres siguen rutinas alimenticias cuidadas, equilibradas y adaptadas a sus necesidades. ¿Quieres saber qué comen realmente? Aquí te lo contamos.
No se trata de comer más, sino de comer mejor
Las modelos curvy no basan su alimentación en cantidades excesivas ni en una dieta descontrolada. Por el contrario, muchas siguen planes nutricionales creados por expertos que se centran en una alimentación balanceada, intuitiva y consciente.
Un día típico en la alimentación de una modelo curvy puede incluir:
- Desayuno: Avena con frutos rojos, yogur griego, huevos cocidos con pan integral o batido de espinacas, plátano y leche vegetal.
- Almuerzo: Pollo a la plancha con quinoa y verduras al vapor, ensaladas completas con aguacate, lentejas o arroz integral con salmón.
- Cena: Sopa de verduras, tortilla de claras con espinaca, pescado con ensalada de hojas verdes.
- Snacks: Frutos secos, frutas frescas, hummus con zanahorias, té de hierbas, barritas energéticas naturales.
Muchas modelos curvy practican el enfoque del «80/20», que consiste en alimentarse de forma saludable el 80% del tiempo y permitirse caprichos o comidas más indulgentes el 20% restante. Así, no se trata de privarse, sino de mantener una relación sana y sin culpa con la comida.
Ejercicio y actitud positiva: el otro lado de la balanza
La imagen de una modelo curvy saludable no se limita a la comida. Muchas combinan su dieta con rutinas físicas adaptadas a su estilo de vida: desde entrenamientos funcionales, natación, caminatas diarias, hasta yoga o pilates, buscando bienestar físico y mental, no un cuerpo «perfecto».
Además, el movimiento body positive ha impactado profundamente en su forma de vivir. Comer bien no es para bajar de peso, sino para tener energía, salud y confianza. Las modelos curvy suelen hablar abiertamente sobre la importancia de quererse a una misma, escuchar al cuerpo y no seguir estándares impuestos.
Modelos reales, hábitos reales
Aunque cada modelo tiene un cuerpo y un metabolismo diferente, muchas coinciden en que la clave está en conocer su cuerpo y respetarlo. Ashley Graham, una de las modelos curvy más reconocidas del mundo, ha compartido en varias ocasiones su rutina diaria, que incluye jugos verdes, proteínas limpias, y entrenamiento regular. Otras modelos como Paloma Elsesser o Tara Lynn han subrayado la importancia del equilibrio emocional y la conexión mente-cuerpo.
Conclusión
Las modelos curvy están cambiando la narrativa de la belleza en la moda: ya no se trata de pesar menos, sino de sentirse bien y saludable. Su dieta no es una estrategia para encajar en moldes, sino una herramienta para fortalecer su cuerpo, su mente y su autoestima. Comer bien, moverse con gusto y quererse sin condiciones: ese parece ser su verdadero secreto.
2 h.
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